Espero bajo ese viejo roble, espero toda la noche. Hacia frio y habia mucho viento, pero no le importaba. Ella sabia que si esperaba un poco mas iba a poder visualizarlo, como todas las noches. Era muy duro para ella ver como el se acercaba con un aire de indiferencia, sabia que cualquier movimiento equivocado acabaria en tragedia. Pero ella llevaba su aroma en la cabeza, en el cuerpo, era inevitable alejarse de el. Con sus dientes puntiagudos y sus ojos rojos, el se acerco muy prudente y la tomo de la cintura, lentamente dirigio sus labios al cuello de la señorita. Ella temblo, pero no de miedo, sino de satisfaccion. El exalo una bocanada de aire y levanto la mirada, tenia sed. Ella enrojesio, no le importo resultar apetecible, no le importo el hecho de lucir como una tonta, solo le importaba el. Entonces, otra vez, el contubo la respiracion y beso sus labios, friamente, por tan solo unos segundos. Cuando se aparto, noto en los ojos de la chica tentacion, desesperacion, amor y drama.
-Nada se compara a mi extraña, fuerte y diferente forma a la tuya de amar.-Concluyo el.

Ella enrojecio, sabia que no valia la pena discutir con el, discutir con un vampiro.